MEDITATIO SONUS C03.S07

Propuesta

Para Meditatio Sonus, he desarrollado un sistema de improvisación en capas, utilizando un sintetizador analógico semi modular fabricado por mi, un teclado controlador, un secuenciador de pasos, pedales de control y un ipad con aplicaciones de looping y efectos.

Con este set empiezo desde el silencio total y voy generando tonos que se repiten, secuencias mántricas, filtraciones y modulaciones que se van encimando y generando texturas y ambientaciones sonoras de creciente complejidad, pero siempre manteniendo una calidad contemplativa, con el objetivo de llevar a los asistentes a un estado de relajación, y olvido de los ruidos de la mente, y a una penetración a un espacio sonoro a la vez consonante y desconocido. Estas capas de tonos improvisados entonces se empiezan a deconstruir y desvanecer, cerrando un largo movimiento pendular y regresando la meditación hacia la tierra, dejando a los meditadores una sensación de serenidad duradora.

Registro fotográfico:

C03.S07

– Registro fotográfico por Alejandro Guadarrama.

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Quincas Moreira

Es un productor musical, ingeniero de sonido, multi instrumentista y constructor de sintetizadores analógicos. Nacido en Brasil de madre actriz y padre publicista, se descubrió músico a los 15 años estudiando piano jazz. Su papá vivía en los EU, y Quincas aprovechó la oportunidad para irse a terminar la preparatória en New Jersey y elegir una Facultad de música para prepararse para una carrera como bajista. Estudio por dos años la carrera de "Studio Music and Jazz" de la entonces UM School of Music (Hoy Foster School of Music), y después se fue a Boston para terminar sus estúdios en el New England Conservatory of Music, curso de Improvisación Contemporánea que terminó dos años después. Ahí tuvo contacto con el microtonalismo, la improvisación generativa, y la música experimental con maestros como Masashi Harada, Joe Maneri, Bob Moses y Cecil McBee.

De regreso a Brasil en 2000, empezó a trabajar como productor de música para comerciales de televisión, en un gran estúdio de São Paulo, la YB Music. Por muchos años trabajó en este y otros grandes estudios, mientras también hacía giras como bajista con bandas brasileñas importantes, y grababa y producía discos. Tuvo su banda como líder, compositor y cantante, la Quinquilharia, y también su propio estudio comercial con el mismo nombre.

En 2008 conoció al maestro Zen Satya Prem, discípulo de OSHO, y empezo a frecuentar sus retiros de meditación durante dos años. Llegó a musicalizar meditaciones colectivas y también videos hechos por los discípulos del Ashram, bajo su nombre de Sannyas "Kaifi" o "Qai-fi".

En 2011 se fue a vivir en México y descubrió aún otra pasión: La construcción de sintetizadores. Una combinación de falta de dinero, sobra de tiempo libre, una necesidad estética por los sonidos de la síntesis sustractiva analógica, y la descubierta del movimiento SDIY (synthesizer do-it-yourself) lo llevó a empezar a construir sintetizadores modulares y a componer música electrónica experimental.

Hoy Quincas se a vuelto conocido como maestro, conferencista, performer y creador de música electrónica generativa, microtonal, improvisada y experimental en México, además de trabajar como compositor para cine y videojuegos, y como ingeniero de grabación, mezcla y masterización en su própio estúdio.

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Meditatio Sonus se compone de Ciclos de 8 sesiones en la que preparamos una curaduría, seleccionando a 8 artistas, que trabajan en la vanguardia de la música experimental y el arte sonoro, y los invitamos a que realicen una investigación sobre las frecuencias del sonido y la mente.

Cada instante de la vida, lo vivimos inmersos en sonido audible e inaudible, nos rodea ,penetra y permea. La impermanencia del sonido es el vehículo ideal para practicar la atención plena. La meditación en el aquí y el ahora, en el instante que se prolongue en la plenitud ante el vacío.

La meditación colectiva lleva a la práctica y encauza la energía de la comunidad, siendo un espacio abierto para la escucha del aquí y el ahora. Un espacio que promueve el presente a través de la dimensión aural y la atención en la respiración como acto fundamental del ser, disipando los pensamientos que nos arrojan continuamente al futuro y que fracturan la red de conexiones vitales de la que somos parte. Focalizar la percepción en el sentido de la escucha abre al resto de los sentidos y se amplía en plenitud la atención al entorno. Las variantes de la naturaleza se vuelven parte del estado de conciencia que sustentan el desvanecimiento del ruido mental. Focalizar el momento contribuye a la plasticidad neuronal en la expansión de los estados de plenitud.

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